El próximo 30 de noviembre se ha convocado una jornada de huelga feminista en Euskadi con el lema de una huelga de cuidados.
El PCTE no puede secundarla por diversos motivos. Aunque estemos de acuerdo en que el sector laboral de los cuidados está ampliamente feminizado y apoyamos las huelgas y las reivindicaciones por las mejoras laborales y salariales, no consideramos que esta sea una finalidad de la huelga en sí, pues no se llevan reivindicaciones concretas en este sentido.
También compartimos la denuncia del debilitamiento del sistema de sanidad pública, pero no creemos que sea una denuncia feminista exclusivamente, sino que afecta a toda la clase obrera.
Por eso, esta huelga no tiene un componente de clase, sino que llama a todas las mujeres, sea cual sea su clase, incluso a aquellas que pagan en negro a una cuidadora de sus hijos e hijas o de las personas mayores dependientes.
A su vez, no podemos obviar que muchas mujeres trabajadoras, especialmente las que más sufren la opresión de clase, con trabajos precarios y muchas veces al margen del sistema, no pueden hacer huelga y sus reivindicaciones no se han tenido en cuenta en una agenda impuesta.
Por lo tanto, para el PCTE esta «huelga» ni es de clase ni sirve a la mujer obrera.