Este año 2020 no podremos vernos en el 500 aniversario del inicio de las luchas comuneras contra la monarquía absoluta de Carlos I. Nos toca abordar la celebración de Villalar con la incertidumbre de qué futuro tendremos cuando pase el Estado de Alarma.
En Castilla y León más de 180.000 trabajadores nos hemos visto afectados por ERTEs de fuerza mayor – sin incluir todos los ERTEs de producción. ¿Y qué respuesta hemos obtenido por las autoridades? Un Plan de Emergencia en el que el 80% del presupuesto se destina a empresas. Además las prestaciones para trabajadores no acaban de llegar porque el servicio del SEPE no ha sido reforzado debido a una mala gestión de la Junta de Castilla y León.
Los datos sanitarios no son mejores. Más de 2.000 fallecidos vivían en residencias de mayores dependientes de la Junta. A esto sumamos que se siguen sin dar datos reales sobre los contagios en estos centros y los trabajadores y trabajadoras no cuentan con EPIs suficientes. Situación idéntica se vive en hospitales, atención primaria y emergencias sanitarias donde los contagios en profesionales ascienden a más del 15% sobre el total de afectados en la comunidad
Esta situación se agrava en el medio rural donde la falta de buena cobertura dificulta el teletrabajo y estudio online, así como todos los trámites administrativos. La falta de asistencia primaria médica obliga al traslado de los usuarios a lejanos centros sanitarios más saturados.
El sistema sanitario público es el que nos está salvando de unas consecuencias aún peores. Nosotros siempre hemos defendido una sanidad 100% pública en las mareas blancas, en las concentraciones en los centros de salud y en todas las convocatorias regionales en Valladolid. Los que se han dedicado a privatizar la sanidad, los que han negado la falta de recursos, los que continúan anteponiendo los intereses privados a los sociales, nos piden una vez más que aguantemos y soportemos los ERTE’s como mal menor.
Pero esta vez, la crisis no la pagaremos los trabajadores ni con nuestra salud ni con nuestros derechos, porque estamos más organizados en los sindicatos y reforzamos día a día un Partido Comunista que hace frente sin cuartel a los ataques capitalistas: el PCTE.
Hace una semana celebramos los 100 años de Partido Comunista en España, un centenario que nos hubiera gustado poder compartir con todos nuestros amigos y amigas en Villalar. En esos 100 años la Comunidad Autónoma de Castilla y León ha vivido menos de 40 años, suficientes para afirmar que la lucha de clases sigue existiendo y el Partido Comunista sigue siendo necesario. Recordemos las luchas por los derechos sindicales en Renfe, Fasa o Michelín, las huelgas de los mineros leoneses y palentinos, la huelga de la construcción en Salamanca en 1978, las luchas populares recientes contra las casas de apuestas, contra las obras en el barrio de Gamonal en Burgos y por supuesto las movilizaciones por una educación y sanidad públicas y de calidad. Así como cientos de sindicalistas y comunistas salimos vivos de las cárceles franquistas de Soria y Segovia, también saldremos vivos y preparados para evitar que las consecuencias económicas del COVID-19 recaigan en nuestras espaldas.
Ahora más que nunca es necesaria la unidad de clase para demandar a la Junta:
– Exigir al Gobierno central decretar la paralización de las actividades de todas las empresas no esenciales, salvo los sectores estratégicos.
– Contratación del personal sanitario y asistencial necesario para cubrir las deficiencias y necesidades para hacer frente a esta crisis sanitaria.
– Cese del uso de personal voluntario para cubrir las carencias del sistema de salud y atención a la dependencia y nuestros mayores tras años de recortes.
– Intervención de los 18 centros sanitarios privados que existen en Castilla y León sin compensación económica alguna.
– Dotar de los medios necesarios para garantizar una educación telemática de calidad, tanto a los docentes como a los alumnos y alumnas.
– Intervención de los sectores productivos, de distribución y centros logísticos estratégicos de nuestra Comunidad para asegurar el suministro de alimentos, medicamentos y material preventivo necesario para trabajadores y familias.
– Aprobación de un nuevo Plan de Emergencia a favor de los trabajadores que contenga:
- Cobertura salarial del 100% para todos los trabajadores afectados por ERTEs compensada a través del nuevo Plan de Emergencia.
- Moratoria avalada por la JCYL en el pago de hipotecas, alquileres y suministros a las familias que ingresen menos de 1.200 euros mensuales netos por miembro de la unidad familiar.
- Movilización de todos los recursos financieros para empresas y ayudas a la contratación ya aprobados (185 millones de €) para la implementación de un plan de empleo público industrial en nuestra Comunidad que nos permita recuperar el empleo perdido, especialmente en las provincias más gravemente afectadas por la desindustrialización.
- Ninguna ayuda para las 20.000 empresas con beneficios en 2019 que han aplicado ERTEs en el marco del estado de alarma.
Esas son las propuestas de lucha que el PCTE os traemos en este Villalar para luchar contra los que todavía nos siguen oprimiendo. Acabamos con la nobleza y acabaremos con la patronal que nos roba el futuro.
¡Solo el pueblo salva el pueblo! ¡No pagaremos la crisis ni con nuestra salud ni con nuestros derechos!
Comité Regional del PCTE en Castilla y León
22 de abril de 2020