La semana pasada conocíamos la intención de aterrizar en Asturies de la Universidad Europea. Una universidad privada de gran renombre (y cuota de mercado, con colaboraciones con universidades privadas de todo el mundo y grandes empresas de otros sectores) que tendría la intención de ofertar estudios en medicina y enfermería -entre otros- dentro de las instalaciones de La Laboral de Gijón. La institución perteneciente al fondo británico Permira, ha puesto sus ojos en Asturies y como ya ocurriera con el acuerdo con Amazon, el Principado está llevando la cuestión con el máximo secretismo, como buenos gestores de la burguesía
Si bien algunas voces dentro del sindicalismo ya han mostrado su rechazo, desde las instituciones proceden con cautela por ‘’falta de información’’ o incluso, otros como el Rector de la Universidad de Oviedo -Ignacio Villaverde-, celebran su desembarco esgrimiendo que ‘’no nos van a hacer la competencia’’. Teniendo en cuenta los antecedentes -como en el caso del gran hospital privado Quirón, que será construido también en Gijón y con quien casualmente la Universidad Europea tiene convenios de colaboración- podemos prever que este hecho será una realidad y que, lejos de acarrear algún inconveniente, serán recibidos con una alfombra roja y muchas facilidades que supondrán grandes beneficios económicos para la empresa.
Aunque en Asturies sea una novedad por ser la primera del ámbito privado, en nuestro país la educación privada ha sufrido en las últimas décadas un impulso inusitado, con el apoyo incondicional de todos los Gobiernos de diferentes signos que la han conseguido convertir en un negocio milmillonario que reparte titulaciones por doquier, muchas veces estas mismas requeridas por el propio Estado para poder acceder a otras superiores o, simplemente, para no partir con desventaja en procesos de concurso-oposición. Un proceso de privatización (muchas veces encubierto) que afecta principalmente a educación superior y FP, pero que ya comienza a tener un peso más que relevante en la Educación Secundaria y Primaria.
El esquema es el que ya vemos en otras comunidades: un mercado que exige trabajadores cada vez más cualificados y especializados, una educación pública en obvio declive y un sector privado que ofrece títulos a precios prohibitivos para rellenar ese hueco. Los propios capitalistas dan la «solución» a un problema estructural de su modelo productivo, sangrando más si cabe a la clase obrera y sectores populares en el proceso. Este fenómeno los estudiantes lo viven año tras año en la Universidad de Oviedo. Número de plazas insuficientes, becas que llegan tarde y se quedan cortas, incrementos en las matrículas sucesivas que se ceban con los hijos de la clase obrera y un régimen de permanencia que los expulsa de la institución. Ante ese panorama, ahora se dará la opción de pasar por caja en la Universidad Europea, teniendo que pagar a la burguesía para que nos enseñe a ser esclavos asalariados.
Los grados escogidos por la Universidad Europea tampoco son coincidencia pues, especialmente medicina, goza de gran prestigio en Asturies y acoge a estudiantes de toda España. Teniendo en cuenta esto, son muchos los jóvenes que año tras año quedan fuera de la Universidad a través de las pruebas EBAU, que funcionan como filtro ante la incapacidad (falta de presupuesto) de ésta de acoger a todos aquellos que desearían estudiar allí. Sin embargo, ahora tendrán la oportunidad de endeudarse (quien se lo pueda permitir) para poder cursar esos estudios que la Universidad Pública les niega. Asimismo, tampoco podemos descartar que sirvan como fábrica de mano de obra para Quirón u otras ante la ‘’escasez de personal cualificado’’, actuando como dura competencia y afectando gravemente a la sanidad pública y a sus profesionales.
No podemos desvincular el anuncio de la implantación de la Universidad Europea en Asturies, con el papel que juegan las empresas en la propia UniOvi. Las continuas declaraciones del Excelentísimo Rector elogiando la ayuda y colaboración del sector privado en la Universidad, así como el papel que está ganando en la Universidad el Consejo Social, a través del cual actores sociales (principalmente empresas) pueden influir en el devenir de UniOvi, tienen como principal objetivo convertir a la Universidad Pública en proveedora de mano de obra barata (o directamente gratis) mediante el sistema de prácticas, obligatorio en muchas titulaciones.
El desembarco de grandes empresas privadas en nuestro territorio -ya sean del ámbito educativo o sanitario- no son un capricho, sino una necesidad del capital (especialmente en tiempos de crisis) de seguir diversificándose y abrir y copar nuevas cotas de mercado, pudiendo continuar con sus ciclos de acumulación. Empresas que generan un daño irreparable en las instituciones públicas, fomentando una mayor segregación entre aquellos que pueden y no pagar, sirviendo como nido de reproducción de las élites y como agencia de colocación para seguir perpetuando el sistema y las desigualdades.
Desde el PCTE y los CJC mostramos nuestra más firme oposición a la Universidad Europea y hacemos un llamamiento al movimiento obrero, popular y estudiantil a tomar las medidas necesarias para frenar esta deriva que no ha hecho más que empezar, siguiendo el ejemplo que podemos presenciar a día de hoy en Grecia con un caso similar, comenzando por paralizar este proyecto y siguiendo por plantear las exigencias necesarias para que todos los recursos se destinen a la Educación Pública en todos sus niveles.
Por una educación únicamente pública, de la más alta calidad y al servicio del pueblo trabajador y de sus hijos e hijas.
PCTE Y CJC ASTURIES, 18 DE ENERO 2024