Ha pasado ya un año desde el inicio de la nueva fase de la agresión israelí al pueblo palestino. Los datos oficiales de principios de este mes de octubre arrojan más de 41.500 palestinas y palestinos asesinados y de 96.000 heridos. El PCTE mantiene su defensa de la causa palestina como una legítima y justa lucha de liberación nacional, ante la que considera que sigue siendo necesario extender la solidaridad internacionalista.
A día de hoy, desde los altavoces de la burguesía de nuestro país y sus aliados, persiste la intención de declarar el 7 de octubre como el inicio de esta guerra, olvidándose sistemáticamente de que el pueblo palestino lleva más de medio siglo sufriendo la colonización y el exterminio por parte del Estado de Israel. El gobierno sionista desencadenó la ofensiva terrestre dando comienzo a un baño de sangre con pocos precedentes históricos, atacando y bombardeado no solo asentamientos civiles, sino escuelas, orfanatos y hospitales en reiteradas ocasiones.
Las tensiones en la zona han ido incrementándose a lo largo del último año, comenzando este mes de octubre la invasión terrestre del Líbano por parte de Israel, y el posterior ataque con misiles de Irán a este último. Se cumplen con ello los pronósticos de la escalada de la guerra en Oriente Medio, que puede alcanzar niveles mucho mayores en caso de una confrontación más directa entre Israel e Irán. Como ya denunciábamos al inicio de estos acontecimientos, en la coyuntura actual se confirma que no es una guerra de Israel contra Hamás o contra Hezbolá, ni mucho menos contra el “terrorismo”, sino una guerra imperialista donde las víctimas son los pueblos de Oriente Medio.
La presión ejercida por las movilizaciones populares ocurridas en distintas partes del mundo ha obligado a muchos gobiernos, como por ejemplo el español, a condenar de palabra algunas de las actuaciones del Estado sionista. Sin embargo, las líneas fundamentales de posicionamiento y acción se mantienen intactas. Por ello queremos denunciar una vez más la hipocresía del gobierno socialdemócrata de España, cuya ambigüedad permite reconocer con la boca pequeña el Estado Palestino, o hacer intervenciones llamando a la “contención”, y al mismo tiempo seguir manteniendo fuertes relaciones comerciales y diplomáticas con el Estado de Israel, así como sus compromisos con los Estados Unidos, la UE y la OTAN. No ha cesado tampoco el uso de nuestro suelo para misiones comerciales armamentísticas con destino a Israel y la compra de armas a este, habiéndose concertado operaciones por valor de más de 1.000 millones de euros desde el 7 de octubre de 2023.
El PCTE llama a la clase obrera y los sectores populares a seguir con las movilizaciones en solidaridad con la causa Palestina, oponiéndose a las distintas formas en que las infraestructuras industriales y militares y las instituciones españolas sirven o apoyan a la ocupación israelí y a sus planes militares.
Por otro lado, ante los pasos dados hacia la extensión de la guerra regional, que tendría profundas implicaciones internacionales, consideramos parte del deber internacionalista comenzar a articular un tejido organizativo de oposición a la escalada bélica. Es hora de comenzar a demostrar la solidaridad con el pueblo palestino y los pueblos atacados de la región con hechos además de con palabras, oponiendo acciones para forzar y exigir, entre otras cosas, la suspensión de la compraventa de armas de España con Israel y el regreso de los más de 600 militares españoles en el Líbano, uniéndose a las reivindicaciones por la liberación de todos los presos palestinos, el cese de la ocupación israelí del territorio de Palestina, y el fin de los ataques por aire y tierra de Israel al resto de pueblos de Oriente Medio.
Buró Político del PCTE